Clamores

lunes, 9 de diciembre de 2013

Es posible

Es posible que la solución a esta lacerante crisis que estamos padeciendo, sea la elaboración de una nueva Constitución, o al menos una seria y profunda reforma de la misma.

La sin razón del Ejecutivo del Gobierno de España, empeñados en el 'ahora no toca', es no tener ningún mimbre de buen estadista que piense en el bien de su país y no, como hasta ahora lo está demostrando, el escaquearse para medrar en su partido.

Me dejan atónito determinadas declaraciones de algunos políticos estos días en los que se hacen entrevistas sobre la Carta Magna y su posible conveniencia de reformar.

Algunos dicen que no es oportuna su reforma, pues aducen que no existe un fin claro para dicho cambio. ¿Qué fin? ¿Qué cambio? Otros, que mientras no haya un claro consenso para efectuar esa reforma -al menos como la que hubo cuando se redactó en el año 1978- , pues que ahora no toca. Determinados políticos dicen sencillamente que no.

Y yo pregunto ¿dónde está la razón o razones de esa negativa? En el consenso que se gestó y presionó en el año 1978, para estos políticos no puede ni debe de ser el mismo que después de transcurridos 35 años, pienso yo.

Palabras, palabras, y más palabras. Lo primero y más necesario es establecer unas nuevas normas acordes con la actual situación, por cierto muy distinta a la del año 1978. Hemos ido campeando desde entonces como buenamente hemos podido hasta nuestros días. Ahora toca sí, ahora toca, otra forma de ordenar nuestra convivencia.

Salir de una dictadura soportada durante 40 años, evidentemente no se podía formular ninguna constitución democrática. Por eso, hoy después de 35 años, aquella Carta Magna ya no se puede sostener para que sea equilibrada y sirva de norma fundamental para todos los ciudadanos, sin distinción alguna.

Tenemos un porcentaje salvaje de jóvenes que nunca han podido trabajar y sin embargo existen unos artículos en la Constitución del 78 que dicen claramente que todo ciudadano tiene derecho a un trabajo. 

Vale eso está muy bien, pero esa norma no se cumple; lo mismo pasa con el tema de la vivienda digna, que todo ciudadano tiene derecho a tener y mira por donde lo que tenemos es una burbuja de pisos y pisos, y miles y miles de desahuciados de sus viviendas.

Así es que el actual Gobierno de España dice que la prioridad ahora es la crisis y que no hay que cambiar la Constitución.¿De qué van?

Es decir ahora no toca y yo digo que ahora ¿por qué no? Si toca, y además es posible.

8 comentarios:

  1. Amigo Javier, para este gobierno nunca será idóneo hacer el cambio constitucional, simplemente porque no hay voluntad por parte de esta derecha conservadora y rancia. Mientras tengan el poder, difícil lo veo que se produzca la tan deseada reforma de la Constitución, que aliviaría mucho en el problema catalan, en algunas reformas necesarias sobre la Corona y en el mapa de las autonomías.
    Un abrazo.

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  2. Amigo Vicente, siempre digo que las utopías, a veces se cumplen, y eso es porque, se piden y se presiona y se demanda, lo que se necesita es unión para pedirlo con insistencia. No pierdo la esperanza de conseguirlo. Aunque lo veamos difícil.
    Un abrazo

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  3. Preguntas: ¿De qué van? Pues van a lo suyo, a lo que les lleve a perpetuarse en ese "oficio de político". Es muy difícil el consenso, pues no hay voluntad, de nadie, para ello.¿Qué sucedería si se cambiase la Constitucióncon con "La Casa Borbónica? Este y otros temas les causa pánico el plantearlos.

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    1. Como digo a Vicente, espero y creo en las utopías. ¿por qué no?
      Gracias Miguel Ángel, un abrazo

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  4. Como siempre, Javier, das en el clavo con tu certero análisis. Y eso digo yo, ¿por qué no tocar ahora la Constitución? Pero no para el tema territorial, que quizá también, aunque yo creo que les da miedo hacerlo para no tener que plantear la forma de Estado, que estamos muchos muy hartos de pagar sueldos millonarios y prebendas a una familia como la de los Borbones. Y de paso podrían hacer desaparecer ese ignominioso artículo 135, que pone por delante los intereses de los especuladores a los de los españoles, la mayor metedura de pata de Zapatero, que se jugó la presidencia y el futuro del PSOE con ese estúpido cambio constitucional a traición.
    Y si en esa ocasión se pudo ¿por qué no se puede ahora? Una vez más, el cinismo de los políticos ¡qué cansera!

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  5. En Asturias o por esos lares, creo que dicen 'qué cansino' eres o 'que canso'.
    La verdad estamos hasta los mismísimos de esta gentuza que nos desgobierna.
    No es que no se atrevan, es que los muy canallas -todos- no quieren perder sus prebendas y sus chanchullos con los dineros de todos.
    La cagó, bien cagada el Zapatero, y ahora más con ese estúpido libro que le han escrito. Vergonzoso y vergonzante este país.
    Gracias Luisa, como siempre por tus comentarios.
    Un abrazo

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  6. La crisis, probablemente, tenga solución. Esa solución pasa por olvidarse de actos corruptos, de tramas, de beneficios desorbitados, de hipocresía, de cinismo, de mentiras; pasa por olvidarse de... ¿El problema? Que un país corrupto, falaz e ignorante lleva consigo, impregnados, esos atributos de los que depende la solución a muchos problemas. Y mientras tanto, aquí estamos y estaremos, esperando a que alguien, un héroe salvador, nos saque del hondo agujero en el que nos metimos. Pero, ¿por qué no somos nosotros ese adalid libertador?

    Un abrazo, @adriantsn

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  7. Así me gusta, querido Adrián, ¿por qué no somos nosotros los que impulsemos este cambio? Yo llevamos diciendo por activa y por pasiva, ¡Lancémonos a ello!
    Un abrazo y muchas gracias, te echaba de menos

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